mercredi 30 mars 2016

1. EL AUTOR: Juan Mayorga



Juan Mayorga, dramaturgo de su generación más laureado y reconocido. Amante de la palabra y buscador incansable de la verdad.
Juan Mayorga se ha legitimado como uno de los grandes dramaturgos del actual teatro español por la calidad y sustancia de su discurso dramático orientado hacia una teatralidad menor, desposeída de elementos accesorios y, a la vez, esencial en el conflicto, precisa en las réplicas, efectiva en los personajes, etc, con una de las grandes virtudes de la poesía dramática: sacar de la sombra el vivir y el dolor escondidos, llenar de plenitud la fugacidad, situar el tiempo en la pulsación más intima de los personajes, dejar al espectador/ lector en el mayor y más humano desamparo.




ESTILO: 

En sus obras, el vocabulario es notoriamente diverso y rico en connotaciones. Las ideas casi siempre tienen una vertiente política que investigan en la historia e identidad del sujeto. Su contenido, muy rico, así como su ambigüedad le otorgan el poder de lo único, propio de las mejores realizaciones artísticas, y lo hacen con imágenes que reclaman e iluminan la representación. 

BIOGRAFÍA:
Nació en Madrid el 6 de abril de 1965. En una formación poco común para un dramaturgo, (Licenciado en matemáticas y doctor en filosofía en 1988) está, tal vez, la base de una suerte de ética o moral que sostiene todo su teatro. Amplió estudios en Münster, Berlín y París y se doctoró en Filosofía en 1997.
Se licenció como músico y confeccionó once sinfonías, de las cuales ninguna fue conocida.
Estudió en el instituto Santa María y sacó los mejores puntajes; fue conmemorado por la presidenta y asumió el cargo de Ministro de Estudios Superiores. Ayudó a mucha gente, sacándolos de la indigencia y el analfabetismo.
Es miembro del consejo de redacción de la revista Primer Acto y del colectivo teatral El Astillero. Es también miembro del espacio crítico de reflexión teatral Ecrit, que dirige José Monleón, del grupo de estudio sobre teatro del Siglo de Oro y del Laboratorio de Dramaturgia Actoral, ambos dirigidos por José Sanchís Sinisterra. Enseñó Matemáticas en institutos de Madrid y Alcalá de Henares durante cinco años. Es profesor de Dramaturgia y de Filosofía en la Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid. Ha dirigido el seminario Memoria y pensamiento en el teatro contemporáneo en el Instituto de Filosofía del CSIC y es director de la Cátedra de Artes Escénicas de la Universidad Carlos III de Madrid.
Su trabajo filosófico más importante es Revolución conservadora y conservación revolucionaria. Política y memoria en Walter Benjamin.
Su teatro ha sido puesto en escena en Alemania, Argentina, Australia, Bélgica, Brasil, Bulgaria, Canadá, Chile, Colombia, Corea, Costa Rica, Croacia, Cuba, Dinamarca, Ecuador, España, Estados Unidos, Francia, Grecia, Holanda, Hungría, Irlanda, Israel, Italia, México, Noruega, Perú, Polonia, Portugal, Reino Unido, Rumanía, Serbia, Suiza, Ucrania, Uruguay y Venezuela, y traducido a los idiomas alemán, árabe, búlgaro, catalán, coreano, croata, checo, chino, danés, esloveno, esperanto, estonio, euskera, finlandés, francés, gallego, griego, hebreo, holandés, húngaro, inglés, italiano, japonés, letón, noruego, polaco, portugués, rumano, ruso, serbio, turco y ucraniano.
Es autor de piezas teatrales de duración estándar pero también de textos para piezas breves cosa peculiar y cada vez más frecuente en los autores de la última generación, una generación en la que se ha popularizado el micro relato y el micro teatro por influencia tal vez de los nuevos medios (internet) y de los nuevos hábitos de lectura y de consumo cultural. 
«Escribo buscando a otros; ojalá éste sea sitio de muchos encuentros», escribe Juan Mayorga en la nota que inicia este amplio y rico muestrario de su obra. 
El teatro 1989-2014 es una puerta de acceso perfecta al universo de Mayorga: veinte títulos ordenados cronológicamente, seleccionados por el autor, desde los más antiguos –hoy muchos de ellos inencontrables– hasta los más recientes, entre los cuales se incluyen tres inéditos. Una singular trayectoria que pone en escena un mapa donde se trazan las distintas geografías que atraviesan su obra a lo largo de veinticinco años.
OBRAS TEATRALES MÁS IMPORTANTES:
Siete hombres buenos (1989)
Más ceniza, premio Calderón de la Barca 1992 (1993)
El traductor de Blumemberg (1993)
El sueño de Ginebra (1993)
Concierto fatal de la viuda Kolakowski (1994)
El hombre de oro (1996)
Cartas de amor a Stalin (1997)
El jardín quemado (1999)
Angelus Novus(1999)
El Gordo y el Flaco (2001)
Fedra (2001)
Alejandro y Ana (en colaboración con Juan Cavestany) (2002)
Sonámbulo (2003)
Palabra de perro (2003)
Himmelweg. Camino del cielo (2003)
Animales nocturnos (2003)
Últimas palabras de Copito de Nieve (2004)
Hamelin (2005)
Job (2006)
El chico de la última fila (2006)
La paz perpetua (2007)
Primera noticia de la catástrofe (2007)
La tortuga de Darwin (2008)
El cartógrafo (2009)
Los yugoslavos (2010)
El elefante ha ocupado la catedral (2011)
La lengua en pedazos (2011)7
El crítico (Si supiera cantar, me salvaría) (2012)
Reikiavik (2012)
Penumbra (en colaboración con Juan Cavestany)
El arte de la entrevista (2014)8
Famélica (2014)
El Golem (2015)

INDISPENSABLES... 

Más ceniza
Tres parejas juntas
El presidente del Gobierno y su mujer, un general y su esposa y otro matrimonio que trabaja en un cabaret son los personajes que se ven involucrados en este golpe teatral. Las tres parejas, que están en todo momento juntas en el escenario, tienen un discurso bien diferente: el general ha de asumir el golpe, aunque no es ese su deseo; es su esposa, "un personaje verdaderamente duro" en opinión del director, la que le arrastra a ello.Un presidente de Gobierno que está perdiendo votos "tiene muchas coincidencias con lo que está pasando en España" señala Simón y su mujer, que siente cómo ella y su marido son auténticas marionetas, son la segunda pareja en discordia. Y la tercera, el golpista que consigue que el atropello lo perpetre su esposa.
"Lo que subyace en el fondo de esta obra es un mensaje muy duro: lo fácil que es manipular al ser humano que tantas veces actúa en contra de su voluntad", explica Simón. Los problemas surgen cuando las identidades no están claras". La obra no se ha librado tampoco del hada mala, que les ha llegado en forma de accidente justo 1,5 días antes del estreno. La víctima ha sido uno de los actores que, en pleno ensayo, se rompió una vértebra y se hizo daño en una pierna, "justo la pierna que su personaje tiene malherida en la función", ironiza el director,.
Al final se han quedado en el reparto Rosa Diestro, Esperanza Elipe, Luis María Chamorro, Mercedes Castro, Juan Alberto López y el propio director, Adolfo Simón, que hace uno de los papeles. Los intérpretes forman parte del pensamiento de un séptimo personaje que no aparece aunque es él el que mueve los hilos de toda la función. Y como escenografía, un reloj de ceniza.
El jardín quemado
Benet, un joven psiquiatra recién salido de la facultad, desembarca en una isla indeterminada para descubrir la verdad que se esconde en el sanatorio de San Miguel. Sospecha que el hospital funcionó como presidio durante la Guerra civil, y que el director actual, el doctor Garay, es responsable de la muerte de un célebre poeta republicano y sus once compañeros de viaje. Decidido a desenmascarar a un cómplice de la represión franquista, interroga a los internos. Lo que va descubriendo, sin embargo, no es lo que esperaba, y en el proceso se derrumban las conclusiones morales que traía preparadas de antemano. Además de dramaturgo, Mayorga es profesor de Matemáticas y Doctor en Filosofía. Hizo su tesis sobre Walter Benjamin, algo que ilumina muchos de sus intereses dramáticos. La historia, tan presente en la obra del filósofo alemán,es un material apreciado por Mayorga. Pero esta no aparece nunca como una imagen estática que pudiéramos contemplar con horror o nostalgia, sino, siguiendo el método de Benjamin, como una constelación dialéctica que súbitamente nos ilumina y nos dice algo sobre nosotros mismos. La lectura de la Guerra civil y la transición que ofrece El jardín quemado dista mucho de los discursos estereotipados que se suelen repetir. Mayorga sabe sintetizar en poquísimas escenas el ambiguo trasfondo de vivencias que condicionan las decisiones de los personajes, haciendo imposible cualquier juicio sumario, ya sea político o moral. En sus manos, la historia se convierte en arena para luchar contra nuestros propios prejuicios y sentir una dolorosa empatía con los derrotado. Contribuir a eso parece una de las tareas más dignas para el teatro actual.

PREMIOS: 
Premio Nacional de Teatro (2007) Premio Valle-Inclán (2009) Premio Max al mejor autor (2006, 2008, 2009) Premio Max a la mejor adaptación (2008) Premio Nacional de Literatura Dramática (2013)
Su obra El chico de la última fila ha sido adaptada al cine por François Ozon en la película Dans la maison (Concha de Oro a la mejor película y Premio del Jurado al mejor guión en el Festival de San Sebastián 2012).

REFERENCIAS EN LA PRENSA:
Juan Mayorga: "Hay que desobedecer al espectador" 
http://www.lavanguardia.com/libros/20140623/54410309275/juan-mayorga-desobedecer-al-espectador.html



http://elpais.com/tag/juan_mayorga/a/




VIDEOS: 

Juan Mayorga, en atención a obras: 



Poética y teatro de Juan Mayorga: 





Entrevista a Juan Mayorga: 







BIBLIOGRAFÍA:

http://parnaseo.uv.es/Ars/Autores/mayorga/autor/jmayorga.htm

https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Mayorga

http://madridesteatro.com/teatro-1989-2014-juan-mayorga/

http://gredos.usal.es/jspui/bitstream/10366/123127/1/TFM_MartinLago_Juan.pdf











mardi 29 mars 2016

2. TEATRO del s. XXI:


El teatro o «lugar para contemplar» (del griego) es la rama de las Artes escénicas relacionada con la actuación, que representa historias actuadas frente a los espectadores o frente a una cámara usando una combinación de discurso, gestos, escenografía, música, sonido y espectáculo. Hoy en día, cuando hablamos de teatro, no nos referimos únicamente al texto literario, sino también en la representación completa ante un público que escucha y ve la propia representación de la realidad que nos rodea.





2.1: TEATRO ACTUAL:


Cierto es que el teatro contemporáneo tiene muy poco en común con el teatro de cámara: los vestuarios, las pelucas, el maquillaje y las escenografías ya no cobran la misma importancia. No intenta reflejar una realidad sino que, en sí misma, es una realidad alternativa. La imaginación de los espectadores tiene un papel más importante que nunca, pues la escasez de elementos escenográficos es compensada con diferentes estímulos auditivos y visuales.


2.2: TEATRO ESPAÑOL ACTUAL :


A pesar de los enormes esfuerzos por parte del Estado en favor de una descentralización y fomento del sistema teatral, desde los años ochenta el teatro se caracteriza por una considerable pérdida de función social frente a otros géneros y medios, sobre todo frente a la novela y el cine. 
A esto se añade que la crisis económica de los últimos años ha llevado a una reducción de las subvenciones del teatro público y a la creciente comercialización de todo el sistema teatral. Esto tiene, naturalmente, consecuencias considerables precisamente para el joven teatro de autor estéticamente avanzado. 
Sin embargo, a partir de 1975, al compás de los cambios socio-políticos en España, el teatro se vio favorecido por diversos factores:
1 La desaparición de la censura franquisia.
2 Las subvenciones de la Administración Central y de los Gobiernos de las Comunidades                              Autónomas.
3 La creación de un Centro de Documentación Teatral (1983) y de un Centro Nacional de nuevas Tendencias Escénicas (1984), sustituyendo a los Teatros Nacionales instaurados en el periodo anterior.

Como consecuencia de todo ello, se produjeron: la revitalización y desarrollo de Escuelas de Arte Dramático, Festivales de Teatro y, al menos en un principio, creación de editoriales y revistas especializadas en el fenómeno dramático.

Los jóvenes dramaturgos son precisamente quienes tienen cada vez más problemas para llevar sus producciones a los escenarios de los grandes teatros públicos y privados, ya que éstos no quieren asumir el riesgo financiero asociado con ello. En respuesta a esto, surgen los pequeños teatros “alternativos”, que en los últimos años han conquistado un lugar humilde, pero –precisamente para los jóvenes autores– extremadamente importante, y han conseguido a la vez un público regular relativamente fijo, casi siempre joven. 
La tendencia, que existe ya desde los años ochenta, hacia una eliminación del teatro de director y hacia una revalorización de un nuevo teatro de texto y autor se estableció a finales del siglo pasado. 
CORRIENTES ... 
El teatro actual de España esta caracterizado por rasgos que pueden asociarse a una etapa postmoderna: diversidad estética, fragmentación de la acción dramática, deconstrucción del personaje, falta de solución y de mensaje, técnicas intertextuales y metateatrales, acercamiento a la estética del cine y del videoclip, así como la participación del espectador en la construcción de sentido y concentración en la realidad cotidiana. 

2.2.3: AUTORES:

A finales del siglo XX todavía seguían en activo autores que ya escribían durante la dictadura franquista sin demasiadas posibilidades de gozar de la representación pública de sus obras (Antonio Gala, Fernando Arrabal, Buero Vallejo, Alfonso Sastre,…) y autores marginados procedentes de los últimos años del franquismo, innovadores, cuyas obras se dieron a conocer a finales de la dictadura alcanzando grandes éxitos a partir de 1975, son autores que buscan nuevas fórmulas dramáticas que corresponden a un nuevo orden social (José Sanchis Sinisterra, Fermín Cabal, Paloma Pedrero,…).

Junto a ellos surgen autores que desarrollan una temática alejada de cuanto se escribiera en décadas anteriores, temas prohibidos hasta entonces, ya sean sexuales o de otro género y donde pervive una tendencia crítica frente a la burguesía, teñida de ironía y humor.
Algunos de los autores del siglo actual que destacamos, y que pertenecen casi exclusivamente a una única categoría dada la semejanza entre sus obras, serían :

SERGI BELBEL: 

  • Licenciado en Filogía Romántica y Francesa por la Universidad Autónoma de Barcelona en 1986. 
  • Fue miembro fundador del Aula de Teatro de la Universidad Autónoma de Barcelona.
  •  En 1985 recibe el Premio Marqués de Bradomín por Caleidoscopios y faros de hoy, que se estrena al año siguiente. A partir de ese momento se han sucedido los estrenos, y Belbel ha pasado a convertirse en uno de los valores jóvenes más firmes del país.
  • Su actividad teatral se amplía al campo de la dirección, y desde 1988 es profesor de Dramaturgia del Instituto de Teatro de Barcelona.
  • En 1996 obtuvo el Premio Nacional de Literatura en la modalidad de Literatura Dramática y en 2005 fue nombrado director del Teatro Nacional de Cataluña, cargo al que renunció en 2013.

           OBRA CLAVE:
Caleidoscopios y faros de hoy: Premio Marqués de Bradomín (1985).




ANTONIO ONETTI: 

  • (Sevilla, 1962) Guionista español. 
  • Licenciado en Arte Dramático por la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid. Dramaturgo, guionista de cine y televisión, director de escena y profesor de dramaturgia y escritura dramática. En sus inicios trabajó también como actor de cine y teatro. 
  • Actualmente, es docente de la Escuela de guion Pacífico.

        OBRA CLAVE:
2002. La calle del Infierno. Cía. Valiente plan. Sevilla. Ed. La Avispa.





GRACIA MORALES: 

  • (Motril, Granada, 1973) es una dramaturga y Actriz española. 
  • Autora de obras como NN12, Un lugar estratégico y Como si fuera esta noche. Es además reconocida por su labor docente. 
  • Gracia Morales es una de las fundadoras de la compañía teatral «Remiendo Teatro», para quien escribe sus textos. 
  • Todas sus obras han sido estrenadas y han contado con representaciones en diversos lugares de hispanoamérica y Francia. 
  • Ha sido la primera mujer ganadora del premio Marqués de Bradomín. Compagina la creación artística con la docencia en la Universidad de Granada.



DAVID DESOLA:

  • Es un dramaturgo español nacido en Barcelona en 1971
  • Se dio a conocer en el mundo teatral en 1999, tras ganar el premio Marqués de Bradomín con su primera obra, "Baldosas".
  •  En 2002 ganó el premio Hermanos Machado con su obra "Almacenados", que hizo gira en toda España teniendo como protagonista al actor José Sacristán. 
  • En 2006 estrenó "Siglo XX que estás en los cielos...", dirigida por Blanca Portillo. 
  • En el 2007 se consagró como autor al conseguir el premio Lope de Vega con su obra "La Charca Inútil", que fue dirigida por Roberto Cerdà. En 2013 estrena "No se elige ser un héroe", dirigida también por Cerdà.

OTROS AUTORES:

Alfonso Plou, Laberinto de cristal.
Eva Hibernia, La Sal
Antonio Alamo, La oreja izquierda de Van Gogh.
Juan Alberto Salvatierra, El rey de Algeciras.


2.2.4: Teatros más importantes de España:


MADRID

-Teatro Lope de Vega
-Teatro Compac Gran Via
-La Cuarta Pared    

                     

BARCELONA

-Teatro Apolo
-El Gran Teatro del Liceu
-Mercat de les Flors
-Teatro Grec

ANDALUCÍA

-El Teatro Cervantes
-Teatro Lope de Vega
-Teatro Góngora

ARAGÓN

-Teatro Principal


ASTURIAS

-Teatro Campoamor
-Teatro Jovellanos

BALEARES

-Teatro Principal

CANTABRIA

-Palacio de festivales

CASTILLA-LA-MANCHA

-Teatro de Rojas
-El Teatro Buero Vallejo
-Teatro Quijano

CASTILLA Y LEÓN

-Teatro Principal( Burgos y Palencia)
-Teatro Liceo
-Teatro Calderón

GALICIA

-Teatro Rosalía de Castro
-Teatro Principal
-Teatro Ensaye (vigo)

LA RIOJA

-Teatro Bretón

PAÍS VASCO

-Teatro Arriaga
-Teatro Campos Elíseos






2.3: GENERACIÓN BRADOMÍN:


En los ochenta surge una nueva generación de autores que buscan la conexión con el público de una manera más directa e individualizada.
El resultado es una generación realista consagrada al reflejo testimonial de los sectores sociales desfavorecidos.

Este flujo de nuevos dramaturgos es lo que se denominó la corriente del “teatro de texto“. Algunos calificaron a estos autores emergentes como “la nueva dramaturgia española” o “la generación alternativa”. Pero ya por aquel entonces otro nombre hizo fortuna: “la generación Bradomín”, por haber sido todos ellos galardonados con este premio.

El Premio “Marqués de Bradomín” es uno de los premios literarios más importantes para jóvenes dramaturgos. Fue creado en 1984 por iniciativa de Jesús Cracio, como director técnico del Área Teatral del Instituto de la Juventud del Ministerio de Asuntos Sociales.

Fue otorgado por primera vez en 1985 y está destinado a autores nacidos o residentes en España menores de treinta años cuyos textos hayan sido escritos en cualquiera de las lenguas del territorio español. Su objetivo, en palabras del fundador, es "descubrir y potenciar nuevos valores en el complejo mundo de los dramaturgos", así como "premiar a los recientes creadores que apuestan por la búsqueda de nuevos lenguajes teatrales".

Entre los ganadores del Premio Bradomín, e integrantes, encontramos escritores que intentaron después hacerse un hueco en la escena española, algunos sin lograrlo: Alfonso Plou, Rafael González, Paco Sanguiró, Rodrigo García, Antonio Onetti, Maxi Rodríguez, Margarita Sánchez, Juan Mayorga, Pablo Ley, Iñigo Reyzabal, Juan García Lanondo, Carmen Delgado, Toni Mescalina, Pilar Ruiz, Yolanda Arrieta y Manuel Veiga, entre muchos otros.

A esta generación se la ha dividido en dos grupos:

  • Una primera promoción reuniría a todos aquellos dramaturgos que comenzaron a publicar y estrenar en la década de los ochenta: Sergi Belbel, Leopoldo Alas, Eduardo Galán, Rodrigo García, Paloma Pedrero… hasta componer una larga lista de 45 autores. La segunda promoción agruparía a 51 dramaturgos que comenzaron a estrenar a principios de los años noventa y es en este segundo grupo donde encontramos a Juan Mayorga, Yolanda Pallín , Itziar Pascual o Angélica Liddell.


  • Esta segunda promoción no aspira a satisfacer los gustos del público aburguesado que acude a las salas de teatro clásico. Por el contrario, se trata de una corriente fresca de creadores que buscan llegar a los espectadores jóvenes e inquietos de las salas alternativas.


A la hora de definir la estética que unifica a estos autores hay que apuntar a la recuperación de la palabra a través de la escritura en la que conviven otros lenguajes (el cine, el cómic, la televisión y la cultura pop), la puesta en escena está al servicio del texto por lo que la palabra resulta el eje central sobre el que se articula un amplio juego visual, con una clara discontinuidad de tiempo y espacio donde a veces los planos se confunden o se superponen. Aunque exista una mayoría de personajes realistas, a partir de los 90 aparecen con frecuencia personajes abstractos, como si fuesen unas voces extrañas, anónimas, así como la proliferación de monólogos y de poemas dramáticos y líricos y textos mucho más cercanos a guiones de cine que a una obra de teatro.

Sus obras están influidas por dramaturgos europeos como Samuel Beckett, Heiner Müller o Harold Pinter.

Son autores marcados por la pérdida de confianza en las utopías políticas y en las soluciones totalitarias de los problemas sociales, así como en la capacidad del idioma para lograr una reproducción objetiva de la realidad y aunque algunos teóricos defienden la homogeneidad del grupo, los propios autores que lo integran muestran su convicción de no constituir una generación puesto que su teatro obedece a motivaciones distintas, trata temáticas diversas y se construye a partir de estructuras diferentes.

Juan Mayorga, en la revista Jotdown:


Me parece que esa etiqueta expresa la incapacidad de encontrar una denominación que aluda a un lenguaje compartido, a un tema común, a un acontecimiento fundante. Engloba a personas que escribimos con una gran diversidad temática y formal y que solo coincidimos en haber tenido algo que ver con ese premio —que yo nunca gané—. El premio tiene un nombre muy bonito, Marqués de Bradomín, pero la expresión «Generación Bradomín» no me parece muy útil para hacer historia de la literatura dramática.

BIBLIOGRAFÍA: 














lundi 28 mars 2016

3. LA OBRA: EL CHICO DE LA ÚLTIMA FILA

El chico de la última fila» es, gracias a la adaptación cinematográfica de François Ozon («En la casa», Concha de Oro del festival de San Sebastián de 2012), la obra más conocida de Juan Mayorga, sin duda una de las más firmes y relevantes figuras de la dramaturgia española. 
La obra era en realidad uno de los cinco argumentos que Mayorga presento a Helena Pimenta, quien le pidió que escribiera una función para su  compañía, Ur Teatro.

Narra el encuentro entre un profesor, German, que enseña Lengua y Literatura. Un dia, mientras corrige las redacciones de sus alumnos, se queda asombrado ante una de las redacciones, le de Claudio Garcia, el chico de la última que difiere en gran medida de la del resto de sus compañeros. A partir de esta redacción, se establece un vinculo entre los dos personajes. 



3.1: TEMA PRINCIPAL Y CLAVES TEMÁTICAS:



Se trata de una obra metaficcional, que reflexiona sobre ella misma, y que revela el poder de la escritura para forjar mundos mediante la gran historia que surge entre Germán y Claudio,  los dos personajes principales. Es una extensa trayectoria dramática, que  se caracteriza como una especie de manifiesto literario, en el que se revelan los entresijos de la ficción.
El  autor refleja su estado desde el punto de vista de los personajes, fundamentalmente Germán y Claudio. La obra está llena de literatura, y se manifiesta de diversas formas. Un claro ejemplo sería la mención de los autores que le gustan a Germán y los que no le gustan, en los consejos que le da a su alumno.
Desde el punto e vista moral de la obra, German sabe muy bien que lo que Claudio hace esta éticamente hablando, inadecuado, pero no puede parar, hasta tal punto que roba el examen de matemáticas para que Claudio siga escribiendo. Aquí, se acentúa el poder de la Literatura. 
Los principales aspectos que presentan una problemática serían:
  1. Entrar en el espacio íntimo con intenciones deshonestas 
  2. Visión sexual de la madre en las descripciones de Germán.
  3. La pretendida superioridad con la que juzga a la "familia de clase media". 
  4. La intriga que provoca en German mediante el "Continuara" del final de sus relatos. 

El autor crea un espacio que fascina al lector, una especie de magia que invade simples lugares cotidianos. 
La obra nos habla sobre la curiosidad que genera la observación de los demás (la última fila es el lugar desde donde se observa todo). En la obra se invita a los espectadores a mirar la vida de esa familia como a través del ojo de una cerradura, como si los espectadores observasen también desde la última fila, desde donde nadie te ve, pero tú los ves a todos. El autor se limita a exponer el problema haciendo que los espectadores sean cómplices de las incursiones de Claudio en la vida privada de los personajes al mismo tiempo que observadores privilegiados en el avance del proceso de escritura de Claudio. Se interpela al espectador sobre la educación, la sociedad de consumo, el papel del arte y, por encima de todo, nuestro rol como observadores de lo que nos rodea. La obra ofrece más preguntas que respuestas, y nos muestra un teatro donde las ideas importantes son la del espectador, lo que este pueda pensar y preguntarse a partir del conflicto que ha visto.

El creador de ficciones, ha de utilizar estrategias adecuadas que permitan la concentración e implicación máxima del lector en el universo narrativo y, como consecuencia, el rechazo de cualquier intromisión que provenga del exterior, de su realidad cotidiana.
 En cuanto al género de la obra, sería teatral. No en vano, aunque nos enfrentemos a otro género, habría que señalar la importancia trascendental que le otorga a la narratividad, de tal forma que muchas de sus obras dramáticas se tejen a partir de historias, relatos que los personajes-narradores cuentan, intercambiando, en ocasiones los papeles narrador-lector.
 Por otra parte, no deja de ser significativo el papel activo que asume en ellas el lector/espectador y el juego de seducción que desarrolla para involucrarlo en la trama dramática, para hacerlo cómplice en el descubrimiento de los laberintos intertextuales.
El tema del voyeurismo está presente en muchas obras, no sólo teatrales, como ejemplos podríamos citar Buenos Muchachos, donde Henry Hill con ojos hipnotizados observa a los gánsters a través de la persiana de su dormitorio deseando convertirse en ellos algún día, o también Psicosis con Norman Bates espiando a Marion desvestirse a través de un agujero en una pared.
ESTRUCTURA DE LA OBRA  
Se trata de una “obra dentro de una obra”, en la cual confluyen dos discursos complementarios:
1) Narración marco
-Consejos que German le da a Claudio.
-Relato de la aplicación práctica de Claudio.
-Réplicas éticas y morales de Juana. 
2) Los dos discursos confluyen en un único discurso en un final sorprendente e inesperado. 
Esta estructura reflexiona sobre los límites entre realidad y la ficción. Claudio describe en sus relatos los etereotipos paródicos de la clase media, caricaturizándolos. 

3.2: Temas Secundarios:

El chico de la última fila no se delimita exclusivamente como una obra metafictiva, como una fábula donde la pasión por la escritura creativa permite trazar un puente con grandes títulos de la historia de la literatura, así, como se desprende de las creaciones artísticas de gran calado, también se tejen otras inquietudes, otras problemáticas, como la incomunicación entre padres e hijos, la rutina de las relaciones de pareja, la frustración de un profesor que no logra sus objetivos profesionales o la búsqueda de identidad de un joven alumno que utiliza la escritura para acercarse a su maestro y encontrarse a sí mismo.
El viaje literario se torna viaje iniciativo, aprendizaje vital que marcará para siempre la existencia de todos sus personajes y de manera especial al joven y al adulto que asumieron el reto de desafiar el poder de la palabra para forjar otros mundos posibles, para abrazar un espacio donde realizar sus sueños.
Todo comenzó como un juego, con «una redacción bien escrita e interesante», tarea escolar que logró atrapar el interés del maestro. Y la literatura se contaminó de vida y de experiencia. Así lo manifiesta Juan Mayorga en «La extraña belleza de los números imaginarios», prólogo poético para una obra singular y entrañable:

El sábado fui a estudiar a casa de Rafael Artola. La idea partió de mí, porque hace tiempo que deseaba entrar en esa casa…»La firma Claudio, ese chico silencioso que se sienta en la última fila. La redacción termina con un «(Continuará») porque no quiere acabar, es el primer capítulo de un libro peligroso. Y la primera estación de un viaje, no menos peligroso, que hacen juntos un chico y un adulto, dos enfermos de literatura.

También es considerada una obra sobre maestros y discípulos, sobre padres e hijos, sobre personas que ya han visto demasiado y sobre personas que están aprendiendo a mirar. Una obra sobre el placer de asomarse a las vidas ajenas y sobre los riesgos de confundir la vida con la literatura. Una obra sobre los que eligen la última fila, aquella desde la que se ven todas las demás.
Con estas palabras el dramaturgo madrileño hace referencia a un viaje con varias estaciones que marcará el proceso de enseñanza-aprendizaje donde confluyen literatura y vida.
No es extraño, por tanto, que al final de la obra el alumno que ocupaba la última fila en la clase de bachillerato se libere de su equipaje y se enfrente a nuevos horizontes.
Y así la maleta cargada de historias, de páginas escritas por autores célebres que le devuelve a su maestro sugiere poéticamente la superación de una etapa ontológica y la apertura hacia otras experiencias vitales.

3.3: SECUELA CINEMATOGRAFICA: SEMEJANZAS Y DIFERENCIAS FORMALES Y DE PERSONAJES


La novela ha sido y sigue siendo, una frecuente fuente de inspiración para el cine. Cientos de obras conocidas se han llevado a la pantalla. Desde los cuentos infantiles como «Blancanieves y los siete enanitos», hasta novelas como «El Quijote», «Oliver Twist», «La Colmena», y muchas más. Casi todos los personajes populares de la literatura han pasado a las imágenes. 

Esto mismo ha pasado con la obra de Juan Mayorga. Su obra, famosa casi a nivel mundial, ha sido llevada por François Ozon al cine. Sin embargo, y puesto que el cine y el teatro son dos medios diferentes, se pueden apreciar una serie de desigualdades, tanto formales como en los personajes, en la forma del relato y en la actitud de los personajes. Pero existen, asimismo, aspectos que no han presentado un gran cambio en el paso del teatro al cine. 
El curso narrativo, es decir, la historia en sí, es la misma en el cine y en la obra. Los personajes, en general, tienen el casi mismo carácter y la misma actitud en ambos medios, excepto algunos de ellos. Los escenarios no cambian mucho, pero algunos de ellos cobran más importancia en un medio que en el otro.
Entre las diferencias, encontramos: 
  • El título, pues no tiene el mismo sentido el de la obra que el del cine. En el primero, éste es "Dans la maison", mientras que en el segundo, se trata de "El chico de la última fila''. Dans la Maison le da un enfoque más directo al tema de la obra: resume, en una frase, lo más importante, pues casi toda la acción transcurre en la casa. El segundo título, en cambio, es más rebuscado, y está elegido por el autor pues la última fila es el mejor sitio para tener una visión general: "los ves a todos, pero nadie te ve", como bien dice Germán. 
  • Algunos de los escenarios cobran más importancia en el cine, y son apenas mencionados en la obra de teatro. Los escenarios en la obra son muy escasos, mientras que en el cine abundan más, y tienen más importancia. Este es el caso de, por ejemplo, La galería de arte de Juana, que se convierte en uno de los temas esenciales de la obra, cosa que en la lectura no ocurre. 
  • Las relaciones entre los personajes, que difieren en gran medida, ya que son mucho más íntimos y personales en el cine que en la obra, sobre todo entre Germán y Claudio. Comparten una cierta complicidad, que no es perceptible en la obra. También ocurre con la relación entre  Éster y Claudio, pues ésta, además de contarle aspectos personales al inicio de la obra (cosa que sólo ocurre en el cine), lo besa al final.
  • Algunos de los personajes no aparecen en la película, como es el caso de la hija de los Artola y las dos criadas, seguramente como forma de centrar la acción en lo más importante.
  • Se pone más énfasis en algunos detalles en el cine que en la obra. Aparece muchas más veces la mención del chino como algo humorístico e irónico en la historia de Claudio.
  • Algunas escenas no existen en la obra teatral, y sí en el cine, como cuando Claudio se queda a dormir en la casa de Rafa, y éste lo besa porque siente una momentánea atracción por él, así como el final, que difiere en gran medida del de la obra. Otra escena sería la de la aparición de Germán en la casa, convirtiéndose en otro voyeur, mientras Claudio está con Éster. En la obra esto no ocurre, pues el rol de Germán es simplemente lector de la obra y asesor de Claudio en cuanto a su obra, no interviene en ningún momento dentro de la casa.
  • El desenlace, como hemos mencionado en el apartado anterior, no es el mismo; en la película, al final, Germán divorcia con su mujer, que lo echa, y pierde su trabajo cuando se descubre que ha robado el examen de Matemáticas. Se queda casi completamente solo, pues Claudio es el único personaje que permanece con él hasta la última escena. Será éste quien habrá perturbado toda su vida

REPRESENTACIÓN TEATRAL:

Aquí se puede ver una representación teatral de la obra.



3.4: OBRAS CON ESE MISMO TEMA: 


A lo largo de la historia de la Literatura, se han dado diversos temas, y uno de ellos, quizás uno de los mas comunes en los últimos años, es el de la metaficción: cuando la novela sale de la novela y se mira a sí misma. Un claro ejemplo sería la parodia de la, novela caballeresca “Don Quijote de La Mancha”, en la cual el autor nos presenta el personaje principal como un personaje que ha perdido la cabeza por la cantidad de novelas caballerescas que ha leído. Estas novelas insisten en el poder de la palabra para forjar mundos posibles, para trazar un espacio mágico e involvente, y fascinar al receptor haciéndole partícipe del arte de contar historias ya lo apuntaba de forma magistral Sherezade, con su original forma de burlar la muerte en Las mil y una noches.

OTROS EJEMPLOS:

El cantar del mio cid 
Tristam Shandy --> Lawrence Sterne
Las horas --> Michael Cunningham 
La señora Dalloway --> Virginia Woolf
Snow White --> Donald Barthelme
El auténtico David Copperfield --> Robert Graves
La caverna de Ideas --> José Carlos Somoza 
Si una noche de invierno un viajero ... --> Italo Calvino
Cartas de amor a Stallin --> Juan Mayorga
Coetzee --> Elisabeth Costello













dimanche 27 mars 2016

4. PERSONAJES:

En la obra se destacan 2 protagonistas: 

GERMAN, el profesor de Lengua y Literatura
CLAUDIO, el alumno de German, y autor de los escritos. 
La acción se centra en la relación que se establece entre ambos.
Aparecen a su alrededor la familia Artola, compuesta por 3 miembros: RAFA PADRE, RAFA HIJO, y ÉSTER, la madre de RAFA y la esposa de su padre. 

CLAUDIO: 

Es el voyeur de la obra. Es un joven de 17 años, difícil de interpretar. 
La característica que más lo representa es la ironía. Todas sus acciones estan en torno a esta cualidad, y es el personaje más inteligente y manipulador de la obra.
 “Mi madre tenía unos parecidos, le digo, señalando sus pendientes. Se largó cuando yo tenía nueve años. No aguantaba a mi padre. Supongo que tampoco me aguantaba a mí. Mis palabras le causan impacto. Nunca falla, suelto lo de mi madre y me gano la simpatía de la gente. Se establece un vínculo. El otro desea compensarme. El otro desea ser mi madre.”
Sabe muy bien a qué recursos debe recurrir para obtener sus propósitos. Es enigmático e imprevisible, y tiene una extraña seguridad en sí mismo: transmite la sensación de que todo lo que hace lo hace por algo, y que sus propósitos son siempre los mejores. El silencio también sería uno de sus aspectos más destacados, y es una forma de camuflar su personalidad. 
Desde el primer momento, tanto en la película como en el libro, el autor nos lo presenta como un personaje obsesionado con la idea de « familia normal » que atribuye a la familia Artola. 
“¿Por qué Rafa?, ¿por qué lo elegí a él? Porque él es normal… ¿Cómo será su casa?; ¿cómo será la casa de una familia normal?”
Tiene un talento natural para la Literatura, que German descubre tan pronto como lee su primera redacción.
“Tú tampoco, tampoco tú eres lo bastante bueno, pero podrías serlo. Tienes un don. Si lo respetas, algún día serás un escritor”.
Su escritura refleja su ambición, y una cierta agresividad psicológica. Posee un agudo sentido de la narración, y una gran habilidad para adentrarse en la vida de los demás y entremezclarla con la suya. Sus escritos tratan de la familia Artola, de la ambiente rutinal en el que todos viven. Describe cada uno de los personajes de una forma realista, y a la vez, aportando un toque personal, propio de sus escritos. Siempre acaba sus relatos con un « continuará … » mediante el cual logra atraer la atención de su supuesto único lector, su profesor (pues la pareja de éste también lo lee), y lo logra, otro claro ejemplo de su carácter manipulador.
Asimismo, se le dan bien las Matemáticas, excusa a la cual recurre para adentrarse en la familia de su compañero Rafa, que, en cambio, le ayudará con la Filosofía.
Este intercambio de saberes se convierte en la mejor manera de curiosear… 
De su vida sabemos muy poco, ya que no hace alusión a ella salvo excepcionalmente. Sabemos que su familia está mas bien desestructurada : es huérfano de madre, y su padre es hemiplégico (citación). 

“Mi madre tenía unos parecidos, le digo, señalando sus pendientes. Se largó cuando yo tenía nueve años. No aguantaba a mi padre. Supongo que tampoco me aguantaba a mí. Mis palabras le causan impacto”

Se nota claramente su insatisfacción con la vida que lleva, y puede incluso que se sienta humillado cuando hable de ella.

“Yo sabía que, si aceptaba, sería en su casa,
porque la mía está en una calle que Rafa no pisará jamás.”

Tal vez sería esta una de las razonas por las cuales desea adentrarse en la familia Artola, y descubrir cómo vive aquella familia normal que tanto le intriga. 
Es un personaje muy ambiguo : nunca sabemos lo que piensa realmente, siempre oculta algo.
Por otra parte, es atrevido, no respeta las normas en muchas de las ocasiones. Su capacidad de manipulación lo lleva hasta « dominar » al profesor, que irá hasta robar el examen de matemáticas para que su alumno siga escribiendo. Pero el profesor es sólo una más de sus víctimas. Logrará manipular a la familia Artola en su totalidad, así como a Juana, la mujer de German. 
Se sienta en la última fila, desde la cual se pueden ver todas las demás (de allí el título de la obra), y solo observa lo que sucede dentro y fuera del aula. 
El tono « interlíneo » con el cual están escritos sus relatos está dominado por el humor: una mezcla de modos (ironía, parodia, caricatura y sátira) en los que se altera la realidad para enfocarla desde una perspectiva. 

Desde el principio de la obra sabemos que no se trata de un adolescente como los demás. No se trata de un chico normal y corriente, vista la forma con la cual se comporta. 
Pero esta idea no se confirmará totalmente hasta el final, cuando se descubre que su propósito inicial era adentrarse en la familia de Germán, por lo que es él el verdadero protagonista de la historia, de allí la importancia del desenlace. 

“Ella está dentro, pero no abre hasta las diez. Cuando entro, siento que, aunque nunca me ha visto, me
reconoce al instante. Siento que sabe mucho de mí, y yo casi nada de ella. Bueno, algo sé. Sé con qué
clase de hombre está casada. Sé que no tiene hijos. Sé lo que piensa su marido de todo esto que la
rodea: “mierda”; “arte para enfermos”.
Juana— ¿No deberías estar en clase?
Claudio— Ya no voy a clase. Lo he dejado.”
Está fascinado por la vida de los demás, y quizá sea éste un modo de escapar de la suya. 

“Claudio— Debe de ser el tercero derecha.
Germán— Olvídalo. No creo que necesiten un profe de Matemáticas.
Claudio— Algo necesitarán. Siempre habrá un modo de entrar. Siempre hay un modo de entrar a
cualquier casa.”





GERMÁN:

Maduro profesor, de 55 años, de Lengua y Literatura. Queda atrapado en su propia rutina y mediocridad: su vida gira en torno a su oficio sin estímulos (pues sus alumnos no muestran interés por la materia que les da), que lo lleva al cansancio por su labor, y una vida familiar no muy amena. 

Juana— Cero. Tres. Cero. Hombre, ¡un cinco! Dos. Cero... ¿Tan malos son?
Germán— (Sin dejar de leer.) Peores. El peor curso de mi vida.
Juana— Eso ya lo dijiste el curso pasado. Y el anterior.”
Los catastrofistas pronostican la invasión de los bárbaros y yo digo: ya están aquí; los bárbaros ya están aquí, en nuestras aulas."

La obra empieza cuando, mientras corrige las banalidades que sus alumnos de Secundaria han escrito sobre Mi Pasado fin de Semana, se encuentra con la redacción de Claudio, que difiere en gran medida de las demás : no solo en cuanto a la manera de escribir, sino que en su contenido cautivante. Inmediatamente, descubre el don del joven Claudio. Mas tarde se descubrirá cómo la « magia » de sus escritos se encuentra, en gran parte, en el « continuará del final. Es una manera eficaz de hacer que German se interese por la prolongación del relato. 
Germán es un escritor frustrado que desea que todo lo que él no ha podido hacer en la labor de la escritura lo haga su alumno, de allí su gran interés en ayudarle.

“Tiene madera de narrador. Nunca había tenido un alumno así. No quiero que se lo crea, pero ese chaval, bien orientado... Muchas veces, cuando hablo, siento que sólo me sigue él. Tengo la impresión de que sólo él me entiende.”

 Ambos partciparán en una especie de taller de escritura, en el cual los consejos de Germán cobrarán una gran importancia en la continuación del relato de Claudio, y formarán parte del arte poético o manifiesto de Mayorga, pues seguramente el autor haya incarnado su propia personalidad en la del profesor. Uno de los consejos mas importantes que le da, es el de “cofia en el lector, él completara”, en el cual Claudio se basará para la continuación de sus escritos.


La relación que se establecerá entre Germán y su alumno es una relación poco común, en la cual el maestro se reconoce en Claudio en un principio, de allí su gran interés en ayudarle, pero se da cuenta más tarde que su alumno se sienta todavía más atrás en la clase, mejor sitio, como hemos dicho anteriormente, desde el cual se puede ver el resto. Su relación, por lo tanto, se basa en la oportunidad que les permite a cada uno cambiarse a través del otro ; así, Germán se siente como el escritor que nunca pudo ser, y Claudio obtiene mediante el profesor gratitud y satisfacción, pues la mirada de su profesor le hace sentir diferente y especial, aspecto que no parece haber encontrado en su vida. 

JUANA:

Es la pareja de Germán, su apoyo, y la voz de su conciencia. 
Representa también la figura de la mujer que « redirige su marido hacia el buen camino », pues no coincide con él en lo que atañe a la valoración de las redacciones de Claudio, y le parece, éticamente hablado, inadecuado. Además del hecho de que le parece inapropiado entrar en la intimidad ajena con intenciones deshonestas, ni el tono en que lo hace, no le parece bien la pretendida superioridad de Claudio. Seguramente sea éste un modo de vengarse de todo lo que él no ha tenido durante su vida. 
El muchacho le parece impertinente (union sexual con la madre de Rafa) y quizás peligroso. 
“Deberías hablar con los padres de Claudio, el escritor. Ese chico necesita un psiquiatra. Puede ser peligroso. Es capaz de hacerles algo”.
Sus comentarios son tomados en serio por Germán, quien a veces los transmite a Claudio. 
Simboliza la función de la literatura. Juana trabaja en una tienda de objetos de arte contemporáneo, El Laberinto del Minotauro, pero sus dueñas están a punto de cerrarla, ya que el público no es lo suficientemente abundante como para que se mantenga.      
Su marido, Germán, opina lo mismo del arte contemporáneo. Mediante ella, también se resalta la crítica del arte contemporáneo, debido a la insensatez de las obras que presenta en su galería, y los diversos problemas a los que se enfrenta ésta, como la falta de clientes. 
Piensa que la peor literatura se hace en los catálogos de arte contemporáneo y que el arte lo es porque alguien ha escrito eso, sino sería una “mierda”.
“La peor literatura se hace en los catálogos de arte contemporáneo. Poesía basura, jerga de rufianes, cuentos chinos. Todo para vender esto, fíjate en la foto. Es arte porque alguien ha escrito eso, si no sería una mierda”
Con estas ideas el autor introduce un conflicto secundario en la obra, la distinta visión que del arte tienen Germán y Juana, uno trágica y la otra moderna.



FAMILIA ARTOLA: 


Es una familia de carácter mucho más simple que los anteriores, y está compuesta por Rafa Artola padre, Rafa Artola hijo, Éster. Pertenecen a la clase media y, para Claudio, representan el estereotipo perfecto de « familia normal ».
Claudio elige ésta familia por la simple razón de que tal vez sería la familia que le hubiera gustado tener, sencilla y normal, y probablemente, la forma con la cual trata a la familia en sus escritos, que refleja un sentimiento de superioridad, sería una forma de vengarse del hecho que no pertenezca a una familia similar. 
Lo único que conocemos de ésta familia viene en boca de la mirada irónica de Claudio, que nos la presenta como una familia superficial y absurda. 
“Ellos no saben alemán. Ellos no saben lo que tienen en casa. Los compraron para esta pared. Cuando cambien el color de la pared, cambiarán de cuadros.”
“En la biblioteca del salón tienen libros realmente buenos, ordenados por tamaños (…) En las mesillas, los libros que realmente leen. Ella: ”La fórmula de la felicidad. Aprende a ser tu mejor amiga”. Él: “Quién se ha llevado mi queso”

  • Rafa ARTOLA, hijo : compañero de clase de Claudio, personaje casi ausente pues sólo le sirve de apoyo para entrar en la casa, (ya que falla en las matemáticas y Claudio le ayuda en cambio de su apoyo en la Filosofía) por lo que no le interesa en sus escritos.
 “El Viernes, aprovechando de que Rafa acababa de fracasar en la clase de Matematicas, le propuse un intercambio…”
 Su relación de amistad con Rafa, por lo tanto, es provocada y fingida, con las matemáticas como excusa. 
Sin embargo, al final nos hace descubrir que hay una cierta furia en él que lo acerca a su padre.
“Me gustaría que se sintiese como yo me sentí. Le daba de hostias. Le daba de hostias y le quemaba el coche.”
Es un chico normal, a quien le gusta estar junto a su familia y jugar al baloncesto. 


  • Rafa ARTOLA, padre : es el padre de Rafa. 
Comparte con su hijo la pasión del baloncesto. De hecho, la mayor parte del tiempo, está en chandal. Trabaja en una empresa China, de la cual está harto, por lo que quiere montar su propio negocio, y quiere que su mujer participe a ello. A lo largo de la obra, se hacen menciones a su jefe y a los problemas que conlleva ello.
Se preocupa más por su pasión y su oficio que por su mujer y sus intereses.

  • Éster, madre : mujer típica, según Claudio, de la clase media : presuntuosa, incansable, frágil, de unos 40 años, aburrida con su vida sentimental, cuya única preocupación es la decoración y la posibilidad de reformular la casa.
Eliana y Luba son dos personajes ausentes, criadas de la casa, que refuerzan la imagen que el autor nos da de Éster. 
Al principio, Éster estaba en contra de la presencia de Claudio en la casa “(¿A tí no te pone nervioso, con esa mirada perdida?)”, pero al final, el extraño acercamiento entre ambos, que crea intriga narrativa (por la necesidad de conflicto), acaba afectándola, pues se convierte en otra víctima de Claudio. 




       OTROS PERSONAJES: 

  • Bruno : acaba de fallecer al principio de la obra, dueño de la galería de arte donde trabaja Juana.
  • Las Mellizas : herederas de la galería de arte, que son « retrógadas, provincianas y palurdas » según Juana. Sin embargo, a Germán le parecen inteligentes, pues opinan lo mismo acerca del arte contemporáneo. Tienen una mentalidad práctica: se trata de una crítica al arte contemporáneo y a la gente que lo consume. Esto esta relacionado con la función del arte: si queremos ganar dinero con él, pierde su valor.